TALICOLES POR LA SIERRA DE FILABRES

Talicoles por Almeria 

Cinco y media de la mañana, todo preparado para la aventura almeriense, kikiu, Manolo, Javi, Margaix y Paulo, dos largas horas en coche para llegar a  Tijola, localidad almeriense enclavada en el Valle del Almanzora, al norte de la Sierra de los Filabres, donde el grupo talicol  inicia la etapa. 

Nueve de la mañana, el sol empieza a calentar y según las previsiones, día de calor y sin viento que moleste a los corredores.

Primeros cuatro kilómetros de calentamiento y antes de entrar a la localidad de Serón, cruce con dirección a  Gergal, inicio del Calar Alto, treinta y dos largos kilómetros de subida y para hacerlo más entretenido los corredores toman el desvío de Las Menas, carretera formidable con un buen asfalto, subida con mayores porcentajes donde los ciclista tienen tiempo suficiente para apreciar los espectaculares paisajes.

  Continua la subida entrando nuevamente a la carretera a Gergal el porcentaje se suaviza hasta llegar al cruce que lleva a los corredores hasta el observatorio astronómico, con unos impresionantes tres últimos kilómetros que dejan a los ciclistas  a 2160 metros de altitud.,

Ahora el pelotón talicolero vuelve a la etapa, empiezan un largo descenso de casi veinte kilómetros con curvas peligrosas de herradura, así y todo en menos de veinte minutos los corredores  finalizan el descenso, giro a la izquierda buscando la siguiente dificultad.

Primeras rampas del puerto Filabres, los dos primeros kilómetros una continua subida superior al 9%, a la altura de la localidad de  Olula de Castro, se va notando el cansancio acumulado que unido a la alta temperatura (35º) . El grupo se fracciona, Javi y Margaix se marchan por delante, tienen ante si, los últimos kilómetros del puerto de Filabres, por detrás la cola del pelotón intenta no perder comba,  pero desiste ante los altos porcentajes de la carretera.

Una vez alcanzado la cima cercana a los 1300 metros, los corredores inicia un nuevo descenso hasta Castro de Filabres, parada para un breve avituallamiento.

Nuevo descenso en dirección a la localidad de Velefique, seis kilometros de tortuosa carretera hasta alcanzar el cambio de carretera.

 Hasta el inicio del puerto, siete kilometros de toboganes donde las subidas alcanzaban en alguno tramos el 10%,. El pelotón se acerca a Velefique, Javi y Margaix, empiezan a marcar un ritmo mas vivo que la cola de pelotón no puede seguir. " Ya nos veremos".

A la dureza del puerto se une la alta temperatura, el termómetro marca los 38º y  durante toda la subida ni una misera sombra donde cobijarse. la única medida donde "refugiarse" es ir viendo la altitud por donde transita, para poder saber lo que queda por subir, pues los kilometros no pasan.

 Menos mal, pensábamos que era un espejismo en el desierto, a falta de un par kilometros una fuente de agua fría en uno de lo muchos miradores, las vistas desde allí impresionantes, se contemplan las innumerables curvas que conforman la subida del duro puerto del Velefique y lo que queda por subir..

La cabeza de carrera esperaba en la cima del puerto la llegada del resto del grupo, para poder iniciar el descenso hasta la localidad de Bacares, y continuar hasta Tíjola donde el grupo talicol, da por finalizada su aventura almeriense